Cada periodo histórico produce sus propios elementos específicos de la cultura. Los edificios históricos que se pueden encontrar en Polonia abarcan ruinas de castillos medievales, renacimiento, palacios barrocos y clásicos, cascos viejos históricos, iglesias, monasterios y varios monumentos conmemorativos. Muchos de estos sitios tienen el privilegio de estar inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial por la UNESCO. Los lugares que deberían tener especial atención son: Auschwitz – Birkenau, el casco viejo de Cracovia y la Mina de Sal de Wieliczka.
En la misma Cracovia puede encontrar hasta 30 museos, el más reciente es subterráneo, bajo la Plaza Mayor. Esta ciudad vibrante, a menudo llamado la “capital cultural polaca”, también recibe muchos acontecimientos culturales de renombre internacional. En el año 2000 tuvo el honor de ser la Capital Europea de la Cultura. Otra evidencia de la riqueza cultural polaca se debe encontrar en los trabajos de escritores polacos, poetas y compositores recogidos en los numerosos museos así como en los sitios con fuertes conexiones con aquellos famosos.